Archivo para marzo, 2014

GRANJERO NO BUSCA ESPOSA

(ENTRADA 328)

 

La semana ha supuesto un retorno a la actividad plena, porque ya estaba completamente recuperado. Así que de lunes a viernes corrí todos los días, los cuatro primeros siete kilómetros, y el último nueve. De esta forma ya llevo 279,3 kilómetros corridos este año. Aunque me ha costado bastante esfuerzo volver a la rutina, debo admitir que lo he agradecido bastante. El fin de semana hubo un poco de todo, aunque lo más gracioso fue ver una graciosa situación en la que un ligue no surgió entre un personaje parecido a un granjero y el borrachín que tan mal me cae, y a quien hemos dado por denominar el llaverín.

 GRANJERO NO BUSCA ESPOSA 31-3-14

Comenzando por el principio, con la semana volvió el mal tiempo, lo cual fue lo único que lamenté pues era cuando volvía a correr. Como es natural acabé bastante cansado tras una semana de regreso a la actividad, así que decidí quedarme en casa tranquilo durante el viernes noche.

Llegado el sábado quedé para comer con mis padres, y me percaté de que mi madre estaba bastante pesada con querer ir al cine. Yo tenía que ir a comprar el regalo de cumpleaños de mi padre, el cual es el miércoles. El problema es que mi madre en ocasiones se encapricha con cosas, pero no se esfuerza por buscar el modo de que se lleven a cabo. No se molesta en proponerle a sus amigas ir al cine, y no se molesta en tener paciencia cuando los demás tenemos otros planes. Es entonces cuando mi madre procede a culpar al prójimo de su incapacidad de hacer planes. Así que el sábado comenzó a torcerse la cosa, y es que mi padre bien podría contentarla con algo tan fácil. Yo acudí a comprar el regalo de mi padre para su cumpleaños, y de regresó a casa comenzó a llover a mares. Debía haber bastante polución, por lo que mi coche quedó algo embarrado. Por la noche salí a tomar algo, siendo el día en el que por fin cambiamos la hora, con lo que ya podremos comenzar a disfrutar de días más largos. Apareció el mencionado llaverín, por la cantidad de cadenas que lleva, quien suele beber bastante y se pone de lo más faltoso. Ya hubo una ocasión en la que tuve que advertirle al dueño del bar, quien me hizo caso, que o me lo quitaba de encima o lo haría ya mismo. No soporto la gente que no sabe beber. El caso es que apareció por allí alguien a quien decidimos denominar el Granjero. Esto se debía a su camisa de cuadros, peto vaquero, y barba blanca. Solo le faltaba mordisquear una paja y llevar sombrero para completar el pintoresco atuendo. No nos dimos cuenta de cómo comenzó el asunto, pero antes de que nos diéramos cuenta, el Granjero parecía buscar esposa y el llaverín era el elegido. La visión era cuanto menos… perturbadora. Sin embargo, llaverín debió ponerse faltoso tras beber bastante, pues antes de que nos percatáramos, el granjero había perdido todo interés. De esta forma llegó el final de esta emocionante relación, ante las carcajadas de los allí reunidos.

Ya de domingo mi madre seguía insistiendo con lo del cine, yo tenía que regresar a casa para terminar unas cosas, pues tendría que dormir en casa de mis padres para acudir a vacunarme al día siguiente. Esto provocó que mi madre siguiera torcida, y al acudir a su casa esa noche descubrí que había ido al cine sola. Esto me molestó, porque estoy seguro de cualquiera de sus amigas la habría acompañado, y cuanto menos mi padre podría haberlo hecho, algo que no dudé en señalarle.

Hoy mismo he estado agotado, ya que en casa de mis padres dormí fatal. Tras vacunarme aproveché que tenía el día libre para lavar el coche, y mis padres vinieron a comer a mi barrio. Sin embargo, parece que la mala suerte ha destacado en este último día de marzo. Por la mañana habían cortado el agua caliente en casa de mis padres, y esta tarde se me ha caído la lámpara del hall debido a un boquete en el techo.

 NUEVA AVERIA 31-3-14

Por fortuna el conserje me echó un cable para poder desinstalarla, aunque ahora tendré que llamar a un escayolista para reparar el techo, y luego a un electricista para reinstalar la lámpara. Parece que tiene que ocurrir algo anualmente en mi casa. En fin, por lo menos no es una luz fundamental. Serás cosas de los lunes…

 Besoides


RECUPERACION FINAL

(ENTRADA 327)

 

La verdad es que ha sido un mes de marzo desastroso en lo relativo a mi salud. Para culminar mis problemas estomacales y de resfriados, acabé el martes con anginas. Así que una vez más me vi obligado a descansar durante la semana, aunque mi recuperación fue rápida, y por lo menos definitiva. Ya el jueves me notaba completamente recuperado. Hoy mismo he podido retomar mis carreras. La verdad es que lo estaba deseando, y ha sido toda una satisfacción poder volver a salir a correr.

 ???????????????

He aprovechado la semana de descanso para poner en orden varias cosas. El jueves por fin operaron a mi amigo Javi. Se ha ido a pasar la baja con sus padres, y ya es solo cuestión de paciencia para que también este completamente recuperado; y es que el pobre llevaba acarreando este problema desde noviembre. Ese mismo jueves David contactó conmigo y le hice una visita en su casa bastante agradable. Llegado el fin de semana tampoco me apeteció hacer nada particularmente especial. El viernes aproveché para cambiar bombillas en mi salón, para lo cual tuve que desmontar todas las lámparas. En seguida me percaté de que casi la mitad de los ocho halógenos estaban fundidos. Compré reemplazos para los ocho, pues habían estado en funcionamiento durante cuatro años. Por suerte, el portero me pudo prestar una escalera más alta para manejarme con más facilidad. Al acabar me di cuenta de que había estado viviendo casi entre tinieblas, y que mi salón volvía a estar lleno de luz. La noche la pasé en casa viendo alguna película de forma relajada, optando por no salir.

El sábado regresaron mis padres de Asturias, explicándome que habían visto a mi tía muy mejorada tras su tercera sesión de quimioterapia. Tras la comida, opté por dejar el coche en casa de mis padres y volver en metro, pues teníamos un día de manifestaciones que probablemente dejarían el centro completamente colapsado. Ya por la noche me animé a salir, aunque el bar no estaba ni de lejos tan animado como el fin de semana pasado. Tomé un par de cervezas charlando con algunos conocidos, y por allí pululaba el peluquero, quien cada vez me da peor rollo. Es de esos torpes naturales, que a menudo meten la pata con el alcohol, aunque en otras ocasiones es realmente majo y está bien charlar con él. Pero el sábado logró cabrearme al ponerme en una situación incómoda con alguien con quien no me hablo, él siendo consciente de esto. En fin, después de echarle un buen rapapolvo, observe como un chaval atractivo suplicaba a quien denominamos como la Rusa, por mantener su “relación”. Esto me pareció curioso considerando los constantes cuernos que la Rusa pone al atractivo chaval. En fin, que ante tanto drama opté por retirarme a casa a dormir.

El domingo fue relajado. Acudí a comer con mis padres, tras lo cual recogí el coche para volver a casa. Hoy ha sido el día en el que he podido volver salir a correr, lo cual me hizo sentir vigorizado de nuevo. La lástima es que el tiempo ha empeorado considerablemente, y que me he perdido semanas inusualmente soleadas mientras me recuperaba. El fin de semana que viene cambiamos la hora, podremos disfrutar de días más largos y finalizara el trimestre que más detesto del año.

 Besoides


ENCUENTRO ESPERANZADOR

  (ENTRADA 326)

 

Recién salido de mis problemas estomacales, me he tenido que enfrentar a un ligero constipado, aunque nada grave. Sin embargo, al salir a correr el martes me percaté de que me convenía tomarme el resto de la semana con tranquilidad. Tenía el cuerpo machacado debido a las dos últimas semanas, y me lo estaba pidiendo a gritos. Además el fin de semana tenían lugar varios eventos, alguno de los cuales resultaría esperanzador para un servidor.

 ENCUENTRO ESPERANZADOR 17-3-14

Así que durante la semana me limité a tomarme las cosas con tranquilidad. El viernes sin embargo, como el cuerpo me pedía más acción, aproveché para realizar una remodelación profunda de mi casa, cambiando de sitio algunos libros para que todo quedara mucho más organizado. La verdad es que el resultado me dejó muy satisfecho. Llegado el sábado, teníamos el cumpleaños de mi madre, con lo que fue día de comida familiar. Le regalé los libros que le había comprado, y también aproveché para interesarme por mi tía, a la que habían sometido a su tercera sesión de quimioterapia. Parece ser que la había pasado bastante bien, y que ya han podido bajarle la dosis de morfina. La verdad es que la comida estuvo bastante bien, y encontré a mi madre bastante animada.

Por la tarde llegué a casa, donde conocí a David. Este era un tío con el que había hablado por Internet, y luego por teléfono. Un tío procedente de las islas, que hacía un mes tenía planeado venirse a Madrid este fin de semana. Durante nuestra conversación telefónica habíamos estado hablando de las series de nuestra infancia, pues tenemos la misma edad, y pasamos un buen rato. David resultó ser un tío encantador, lo cual fue esperanzador debido a algunos desastres de encuentros internautas que había tenido. Después de intercambiar varias series de nuestros respectivos discos duros, pasamos una tarde de sexo de lo más satisfactorio que he experimentado en mucho tiempo. Tras charlar un poco más, se fue al encuentro de sus amigos, y yo partí a mi bar habitual.

El bar se encontraba inusualmente hasta arriba de gente, y algunos eran francamente atractivos. Sin embargo, debo admitir que servidor estaba totalmente agotado. Charlé un buen rato con Miguel y algunas personas más, pero acabé por retirarme para dormir y descansar. El domingo hablé con Javi, a quien por fin operan el jueves. Su hermana vendrá para estar con él y llevarlo a que pase su baja en casa de sus padres. Por otro lado, mis padres parten para Asturias, para acompañar a mi tía en el día de su santo. Hoy mismo he charlado con mi vecina Ana, quien se encuentra en su ciudad natal visitando a su familia. La verdad es que a pesar de que el mes me ha tenido algo machacado, el fin de semana me ha resultado esperanzador, y ha logrado elevar mi dañada moral.

 Besoides


INEFICAZ PERDIDA DE TIEMPO

  (ENTRADA 325)

 

La verdad es que hemos podido disfrutar de una semana de muy buen tiempo, algo inusual para esta época. Sin embargo, los problemas estomacales me han visitado de nuevo. Añadido a esto, no tardé en darme cuenta de que no había sido el único. Mi madre y primo político también tuvieron problemas, y los tres comimos ostras el sábado pasado, con lo que dos más dos son cuatro. A pesar de esto, como ya había estado malo del estómago, en esta ocasión no me vi tan afectado. Simplemente me he limitado a descansar, y en un aspecto menos placentero a perder el tiempo.

 PERDIDAS DE TIEMPO 10-3-14

Así que durante los tres primeros días de la semana decidí no hacer ejercicio. Solo he tenido unas décimas de fiebre, así que simplemente me he visto afectado por el agotamiento. El jueves y el viernes sí me animé a ir a correr, aunque me tomé las cosas con mucha calma, y sin forzar la máquina demasiado. Supongo que me animé porque me daba pena ver unos días tan bonitos y quedarme en casa. Sin embargo, debo admitir que quedé completamente agotado, sobre todo porque después tocaba limpieza en la casa. Así que el viernes opté por no salir, y me quedé en casa viendo una película.

El sábado fui a comer con la familia, tras lo cual acudí a hacer unas compras, pues el sábado que viene es el cumpleaños de mi madre. Terminé por comprarle tres novelas policiacas, pues se ha aficionado bastante al género últimamente. La verdad es que mis compras se extendieron, y acabé volviendo a casa sobre las ocho, debido a un atasco producido por una de las muchas habituales manifestaciones. Aunque todavía estaba cansado me animé a tomar algo, y charlé un buen rato con el peluquero que llevo un tiempo conociendo, y con algunos de los habituales que me caen bien. La verdad es que por lo general nos echamos unas risas, aunque el ambiente estaba bastante venido abajo, sobre todo comparado con la cantidad de gente que había habido el fin de semana pasado. Como seguía algo cansado, opté por retirarme, aunque la verdad es que cerré el bar, algo que llevaba tiempo sin hacer.

Ya de domingo, comí de nuevo con mis padres. Estuvimos solos los tres, porque mi hermano tenía otros planes. Después de comer me retiré a casa con la intención de ligar algo por los interneses, pero básicamente perdí toda la tarde. Es curioso como algo diseñado para facilitar contactos se ha convertido en una especie de casting de “divinas”… que no lo son tanto. Hoy mismo quedé con un chaval, aceptando que en ocasiones hay que bajar el listón. Resulta que el chaval, no muy agraciado, se vino a casa, pero optó por marcharse, por razones que prefiero desconocer… ¡La gente está grillada! Espero que esta semana sea mejor.

 Besoides


COLGADO EN CARNAVAL

  (ENTRADA 324)

 

La semana ha estado caracterizada por altibajos, y por algunas conductas que personalmente me han molestado bastante. Aunque parecía que me había recuperado bastante bien de mis molestias estomacales, ayer domingo he vuelto a encontrarme algo fastidiado. A pesar de estos aspectos, el ejercicio de la semana me sentó bastante bien y ya llevo 213,8 kilómetros corridos este año. El sábado fue Carnaval, aunque servidor termino quedando bastante colgado, ya que hay cosas para las que parece que no cuentan con uno.

 CARNAVAL COLGADO 3-3-14

Durante la semana, mis padres partieron hacia Gijón para visitar a mi tía, y para estar presentes durante la instalación de unas nuevas ventanas en su casa de allí. Mi tía ya ha tenido dos sesiones de quimioterapia, y parece que en general lo lleva bastante bien, aunque habrá que ver cómo sigue el tratamiento. Por lo demás la semana fue más bien tranquila, dedicada al deporte y a tomarme las cosas con tranquilidad tras mi recuperación. El jueves estuve en casa de mi amiga y vecina Ana, donde tomé unos vinos y estuve charlando sobre relaciones familiares y otras cuestiones. Creo que fue allí donde cogí frio otra vez, aunque no me percataría hasta unos días más tarde.

Llegado el viernes salí a tomar algo, pero la verdad es que el panorama era tan deprimente, que opté por retirarme temprano. El sábado fui a comer con mis padres, aunque llegar fue toda una odisea debido a un considerable atasco relacionado con una manifestación que había en parte de la Castellana. Como aquel día era Carnaval decidí renovar uno de mis famosos disfraces, y mandé mensajes para quedar, que no fueron contestados. Después de comer, acudí a comprar unos utensilios de baño que necesitaba y me compré la película “Rebecca”, que estuve viendo por la tarde. Como no tenía plan, ni nadie había contactado conmigo, opté por no disfrazarme. Acudí a mi bar habitual, donde sí aparecieron muchas personas disfrazadas, sobre todo comparando el evento con el pobre del año anterior. Javi, Jesús, Miguel y Javier aparecieron disfrazados; y la verdad es que me sentó bastante mal que no hubieran contado con un servidor. A veces me da la sensación de ser utilizado como pieza de recambio, y la verdad es que el asunto me dejó bastante hundido. Acabé por retirarme harto de ver a personas que no necesitaba ver, y otras que han logrado obtener lo que no se merecen. En fin, llevaba tiempo sin que me diera un bajonazo, y en esta ocasión me dio… que le vamos a hacer.

El domingo acudí a comer con la familia, y fue cuando empecé a sentirme mal una vez más por culpa del estómago. La semana también ha finiquitado el mes de febrero, con lo que ya solo queda un mes para el ansiado cambio de hora que tanto necesito.

 Besoides