Archivo para septiembre, 2009

LA ÚLTIMA BODA

 (ENTRADA 93)

 

El fin de semana supuso mi regreso a Gijón, para la que ha sido la última boda de mi pandilla, la de Juan y Nieves. Esto ha dejado constatado el hecho de que a partir de ahora, soy el soltero oficial del grupo.

LA ULTIMA BODA 28-09-09

Antes de entrar en los detalles de lo que, sin duda, fue una gran boda, he de señalar que el fin de semana puso punto y final a mi historia con Rubio. En teoría íbamos a vernos el viernes, pero ese mismo día me llamó por la mañana para indicarme que le iba a ser imposible por motivos profesionales. A eso de las cinco, y estando yo en el tren de camino a mi ciudad natal, me llamó para confirmarlo, con lo que decidí quedar con mi gran amiga Bea para tomar una sidra. Pues bien, a eso de las siete y media me vuelve a llamar que va a dejar de lado el “tema profesional” y que prefiere verme. A mi personalmente me hartó tanto “si pero no”, y le indiqué en un alto tono de voz, que era demasiado tarde, que ya había quedado, y que no iba a hacer como en el verano, que constantemente dejaba plantados a mis amigos para estar disponible. Y es que esto es la prueba de algo que siempre ha sido una realidad para mí, las palabras valen menos que los hechos, y ya me he hartado de ser el substituto de Rubio. Punto y aparte.

Al día siguiente la pandilla al pleno nos reunimos para la última boda que nos quedaba pendiente, la de Juan y Nieves. La verdad es que el tiempo quiso colaborar a pesar de las amenazantes nubes de entrada la mañana, y nos reunimos todos en el ayuntamiento de nuestra “ciudad del alma”, para el evento. La ceremonia civil fue corta y emotiva, aunque me perdí un poco en el sermón haciendo alusión a “las columnas que soportan el templo, y el ciprés que no se que problema tenía”. Servidor estuvo a punto de arruinarle el vestido a Belén tras un accidente con un culín de sidra, pero quiso la fortuna que la mancha secara y despareciera en unos segundos. Una vez terminada la ceremonia partimos al banquete en autobús, y la verdad debo decir que fue impecable. Toda la comida estaba riquísima, y no faltaron las risas, y alusiones a tiempos pasados. Después de inflarnos a comer nos trasladamos a la discoteca una planta abajo, donde quemamos calorías hasta entrada la noche, con un breve descanso para cenar… ¡¡fabada!! Solo encontré un par de problemas al evento: 1- No ligué (sigo pensando que el soso de nuestra mesa era gay…). 2- Se me hizo demasiado corto.

Al día siguiente me dirigí andando por el paseo de la playa para acabar en la estación, y no puedo negar que me sentí inusualmente triste y algo solitario. No es fácil darse cuenta de que todos tus amigos han triunfado emocionalmente, y han logrado encontrar su media naranja. Le hace a uno sentir como “una especie” de fracasado emocional, y en el fondo reconozco que me dan envidia. Dudo que haya nadie que se alegre más por ellos que yo, pero se siente uno particularmente desencajado al ser el último soltero. 

 Y es que este fin de semana puso punto final a un ciclo en la larga trayectoria de nuestra pandilla. Es una realidad evidente que tardaremos mucho tiempo en volvernos a reunir todos de nuevo. De momento a mi me toca continuar en un eterno viaje, y de esta forma, sigo caminando…

 Besazos y Abrazazos


PASADOS INESPERADOS

  (ENTRADA 92)

 

El fin de semana se presentó con unas cuantas sorpresas inesperadas. No fueron buenas, ni malas… simplemente inesperadas. Mientras el pasado me sorprendió revisitandome nueve años después, observé como poco a poco me siento más y más cómodo en mi nueva faceta.

PASADOS INESPERADOS 21-09-09

Durante la semana, y para mi sorpresa, Rubio ha llamado bastante. Me sigue pareciendo curioso lo mucho que insiste en contactar conmigo, ahora que no estoy disponible, y todo parece señalar a que habrá un reencuentro el viernes que viene, cuando vuelva por ciudad nata, debido a la boda de Juan. Sin embargo mantengo determinados escudos levantados, cosa de la que él se da cuenta no gustándole demasiado. En fin, veremos como evoluciona eso…

Llegado el fin de semana, el viernes resultó más bien tranquilo, quizás en parte debido a que el sábado era “La Noche Blanca” en Madrid. De esta forma salí el sábado por Rimmel, donde encontré a más gente que no había visto desde antes del verano. Sin embargo la mayor sorpresa de la noche no iba a ser esa. Un tío de aspecto familiar se dirigió hacia mí. Evidentemente me conocía y me comenzó a dar pistas, hasta que logré deducir de quien se trataba. Era Jorge, un chico con el que había salido hace ya nueve años. Enseguida intentó hacerme sentirme mal por no acordarme de él. Sin embargo le di la vuelta a la tortilla, porque había algo de lo que si me acordaba, y él no… su nombre. La verdad es que estaba bastante cambiado, y todo encajó al darme cuenta de que en su momento me había mentido con la edad, y en lugar de llevarme tres años de diferencia, me llevaba nueva. Esa misma noche, mi buen amigo la Tremenda actuaba en otro bar, así que me despedí porque ya llegaba tarde para verle. Jorge me preguntó si podía ir con él, y no puse objeciones.

Como de costumbre la Tremenda estuvo genial, y la risa fue constante. Entre bailoteo y bailoteo, y para mi sorpresa, Jorge me plantó un beso. Sin embargo su interés resultó no ser en querer divertirse un rato, sino con la idea de que volviéramos a vernos. En seguida me acordé de porque las cosas no habían funcionado con él. Jorge era el clásico novio posesivo, al que se le daba mal compartir. Por otro lado no yo soy el tipo de persona que aparca a los amigos cuando comienza una relación sentimental (algo que la mayoría hace, y me parece la más soberana grosería). Le dije que no, y regresé con la Tremenda a la barra, mientras aguanté el típico comentario cotilla y mal hiriente de otra persona. Jorge se marchó algo molesto, y de veras lo siento, pero lo último que necesito son más complicaciones. Sobre el resto de la noche prefiero no hablar… aunque estoy muy sorprendido conmigo en los últimos meses. No se que me pasa que estoy ligando bastante, y no estoy acostumbrado a tanta atención… ¿será debido a alguna feromona extraña que he liberado?

  El domingo fue más tranquilo. Javi (Tremenda) y servidor fuimos al cine a ver “Distrito 9”, y después a tomar una cerveza.

DISTRITO 9

El fin de semana estaré de vuelta en Gijón de boda, la que será la última de mis amigos de juventud. Veremos que tal va la cosa, aunque tengo la intención de pasarlo muy bien.

 

Besazos y Abrazazos


COMIENZA LA 3ª TEMPORADA

 (ENTRADA 91)

 

Pues si, a dos meses de que este espacio cumpla dos años, comienza su tercera temporada. De esta forma me he reintroducido un poco en Madrid de nuevo, lo suficiente para percatarme de que se avecinan cambios. El verano me ha servido para concentrarme un poco en mi mismo, y dejar de obsesionarme por lo que piensan los demás.

TERCERA TEMPORADA 14-09-09

Rubio se ha mantenido en contacto, y durante la semana ha llamado unas tres veces… algo curioso teniendo en cuenta que cuando yo estaba en Gijón apenas llamaba, pero en fin, como uno es como es, ya hemos quedado para vernos el último fin de semana de este mes, cuando regrese a mi ciudad natal, pues tengo una boda el Sábado. En fin, que parece que por el momento va a haber más Rubio… aunque reconozco que después del turbulento verano, me he sentido un poco tranquilo poniendo algo de distancia por el medio

El miércoles fue la esperada reunión entre la Tremenda y servidor, y quedamos para cenar y ponernos al día de las circunstancias veraniegas. Después de un atracón de pasta, y de rajar a gusto sobre diversos temas, nos sentamos a disfrutar de una pelí de terror, como solemos hacer siempre. Tras haber seguido de cerca mis aventuras con Rubio durante todo el verano, la Tremenda tenía esperándome uno de sus grandes montajes, la portada del tercer cómic de Superdanni, que aquí os dejo. El tema no puede ser mejor: Tremenwoman apresa y se apodera del “Doctor Muermox”, mientras que Superdanni escapa con Rubio más conocido como “Golden Boy”. Ni que decir tiene que nada más verlo me eche a reír como un descosido. Aquí os dejo la portada, y más abajo dos viñetas. 

 El sábado fue día de reencuentros… y mucho más importante de valoraciones. Si de algo me ha servido este verano es para replantearme muchas cosas, y muy seriamente. Una cosa es tratar de ser buena persona lo máximo posible, y otra cosa es pecar de cruzar la línea que lleva a la soberana estupidez. No estoy dispuesto a amargarme el invierno, que bastante poco me gusta de por si, comiéndome la cabeza por actitudes de gente que me demuestra una y otra vez que no merecen la pena.

Como he dicho, este sábado pasé por los tres locales que frecuento durante el año en Madrid. Aunque hay muchos amigos, y / o conocidos, que aún no han regresado, he podido ver a muchos. De esta manera valore los reencuentros, la gente que de verdad se alegraba de ver a uno, la gente que mostraba un poco de falsedad. Pero me encanto como con toda mi chulería asturiana, no me moleste ni en intentar decir “hola” a determinada gente que sin conocerme de nada, ha decidido que yo soy de una determinada forma. El lema de esta temporada va a ser: primero yo. Al que no le guste, que se rasque.

La noche la acabe con mi colega Enrique, con quien me fui de bailoteo a la disco de turno, y el domingo… recuperación total. Pues la verdad es que me ha costado acostumbrarme de nuevo a la sequedad y calores de Madrid (ya lo echaremos de menos cuando estemos a bajo cero este invierno.

Antes de irme os dejo las viñetas que me ha hecho la Tremenda, que la verdad es que a día de hoy es lo único autentico del ambiente.

 

 Y así comienza una nueva temporada,

 Besazos y Abrazazos


FINALES…

  (ENTRADA 90)

 

Acabo de regresar a Madrid en tren, con lo que se da por finalizado el verano, que la verdad no ha estado nada mal. Por supuesto incluido el romance con Rubio, que me ha hecho ver lo mucho que echaba de menos estar con alguien. Como es costumbre, no he tenido el final feliz de película, aunque si he de ser sincero no me lo esperaba. De nuevo solo, habrá que ver que depara la temporada. 

FINALES 07-09-09.jpg

 La semana transcurrió sin noticias de Rubio que pudo escaparse en viernes, justo cuando mis amigas y yo celebrábamos nuestra despedida de soltera… sin la futura novia. Asín, que como mis amigas tenían curiosidad en conocer al muchacho, pues se apuntó, y Rubio se vino a la cena. La verdad es que encajó bastante bien, y me encantó hacer manitas debajo de la mesa con él. Después de cenar nos escapamos para… básicamente ser muy, muy malos.

Al día siguiente, Sábado, salí con mi amigo Ramón a tomar una copa de vino y pasar por el bar de ambiente, donde Rubio se encontraba con el pánfilo de su marido. Durante un par de escapadas al baño hubo un poquito de besos apasionados, y me quedé un poco “flasheao” cuando me soltó que “me quería”. Como esa frase, llevó esperando mucho tiempo a oírla, no me resultó demasiado creíble. Le hice ver que me creía que le gustaba (y mucho), y que evidentemente la atracción era evidente, pero que querer era una palabra muy fuerte para haber compartido solo cuatro noches con alguien, que además esta casado.

Mi corazón quiere creer en cuentos mágicas de hadas, pero ya estoy mayor para creer en imposibles y mi mente me dice que no he sido más que lo siempre acabo siendo… el Chico Substituto. Así se lo hice ver, y el me aseguró que no, que había sido algo más, que no me iba a olvidar cuando me fuera… pero tuvo que regresar con el pánfilo del Muermo, con quien se acabó marchando del bar. Los seguí el camino que me tocaba en común para llegar a la mía, Rubio se giró y me vio.

Al día siguiente me llamó, y estaba al borde del llanto. Me dijo que no debió de haber ido el día anterior, que le mató ver como mis amigos se despedían, y el tener que estar con su marido. Yo simplemente le recordé que era un alivió el marcharme, y que no hubiera podido aguantar en este plan mucho tiempo. Hoy partí en el tren de vuelta, y me llamó durante el trayecto, y me dijo que había sido algo más que simples escarceos… Después me senté y medite sobre las curiosidades de la vida, Rubio de verdad me había gustado, y hubiera sido perfectamente factible que acabará por enamorarme de él… pero parece que la vida me tiene algo de manía (solo a veces).

Hay algo en que no dejo de pensar.  Desde que abandoné el Hospital siempre he caminado con mi estatus de seropositivo por delante. En este caso, y por primera vez, no fui capaz de hacerlo. No que decir tengo, que se tomaron todas las precauciones necesarias, pero en esta ocasión no fui capaz de arriesgarme al rechazo. Por otro lado había sido un verano con lluvia, días de sol, viajes en bicicleta a mi playa favorita, cuyo sendero de descenso me esperara hasta el año que viene.

 El tren llegó a mi Madrid, donde tomé el metro y mis oídos comenzaron a habituarse a los sonidos familiares de mi conocida urbe. Y de esta manera comienza una temporada nueva… y sigo caminando.

 Besazos y Abrazazos