Archivo para marzo, 2008

ESTRELLAS QUE BRILLAN

 

 (ENTRADA 19)

 

La transición del invierno a la primavera, me cuesta, no os voy a mentir. Me arrastro fuera de una estación que saca lo peor de mí, o el aspecto más melancólico, mientras mi piel pide a gritos la caricia del sol.  Varios eventos me han hecho sentir bien este fin de semana, el primero el éxito de una muy buena amiga. Su nombre Elena Montesinos, más conocida como Parsifal para los amigüitos.

ESTRELLAS QUE BRILLAN 31-03-08

Elena lleva consigo un pedazo de mi alma, que le regalé en su momento. Ambos sabemos lo que es enfrentarse a las adversidades con valor, entereza y principios, y en su momento nos apoyamos el uno en el otro. Aunque ahora ella vive en Valencia, y yo en Madrid no hay día que no piense en ella. Ella es una estrella que brilla con luz propia. Y ahora ha publicado su primera novela… el orgullo que experimenta un amigo cuando pasa por el Corte Ingles y compra el libro de una buena amiga es indescriptible… la cajera se quedó un poco asin (con cara de “y a mi que me importa”) cuando le dije: “la autora es amiga mía”… ¡Desde luego que desagradable puede ser la gentecilla!

El libro se titula “OLOR A LLUVIA” de momento solo he leído 42 paginillas, porque lo quiero saborear poco a poco (me da que voy a fracasar en el intento)… lo pública Kailas Editorial…y aquí os dejo el resumen de la contraportada:

 La lluvia escuece sobre las heridas abiertas.

Hay momentos que nunca se superan;

Hay sitios que nunca se olvidan

 “El reportaje de una noticia irrelevante en un pueblo aparentemente inofensivo y el dolor de abrir las heridas que se suponían cerradas enfrentan a una joven periodista a sus miedos. Con una nueva identidad, y unos lazos familiares casi olvidados, Sira regresa al pueblo en el que nació y que años después se vio obligada a odiar. La investigación le conduce hasta un misterioso mural encantado que, según dicen, ha traído la desgracia al pueblo. ¿Serán meras supersticiones? Sira tendrá que descubrirlo a la vez que se descubre a si misma, bajo el olor a lluvia de la costa y el temor de sus recuerdos, en un pueblo en el que todo el mundo parece guardar un extraño secreto.”

 Elena Montesinos propone en su primera novela varios viajes paralelos, que sin saberlo dirigen al lector hacia el rechazo y el dolor, en carne viva, de una ausencia

 ELENA… ¡ESTOY TAN ORGULLOSO DE TI Y DE LLAMARTE AMIGA, QUE ESTALLO DE ALEGRÍA!

 OLOR A LLUVIA 31-03-08

Pasando a otra cosa, mientras compraba el libro en el Corte Inglés me encontré con un suceso que me dejo completamente desencajado. A la altura de la zona de películas por la que siempre paso para ver si me compro algo apetecible, voy y escucho a esta señora decir: “Deja tranquilo a ese niño que esta perdido, y no queremos saber nada del tema”

Giro mi cabeza y veo a un chavalin de unos cinco años llorando desconsoladamente, y sinceramente me quede de piedra, la gente pasaba alrededor y le ignoraba completamente… ¿¡¿Pero que coño le pasa al mundo, y a donde cojones vamos a llegar?!? (Disculpad el vocabulario pero hay cosas que me enervan). Total, que como no había cabina telefónica a mano (para ponerme el traje de super-héroe digo…) me acerco al chiquillo en plan Clark Kent que no mola tanto pero en fin. No hablaba español, pero afortunadamente hablaba inglés, le lleve al mostrador más cercano, y me quede con la dependienta… afortunadamente al poco rato apareció una desconsolada madre sueca a la que le comuniqué el evento, y me lleno el careto de besos SMUAK, SMUAK, SMUAK, SMUAK…. Pudiera ser que estuviera agradecida… pero yo creo que me encontró irresistible (que queréis, me gusto mogollón, ¡¡ROWTLF!!). La vida de super-héroe es dura, así que decidí regalarme una pinta en mi escondite irlandés, donde había un partido de no se quien contra no se quien, y como hay que adaptarse, me uní al equipo de no se quien (hablaban inglés pero no se más), y celebré un gol a no se quien… mientras Shane (un camarero colega, se reía… me conoce bien)… ¡¡Selección Natural, pura y dura!!

Antes de marcharme escuche a alguien hablar sobre una “malvada agenda gay”, y yo pensé para mi mismo conmigo mismo ¡¡Cielos!! Existe una malvada agenda gay, y no la tengo todavía…. ¿será algo parecido a esta lista?

 -Reclutar a nuevos miembros de la causa gay   

-Convertir a jóvenes de indecisa sexualidad   

-Hacerse con el control de todos los gobiernos del mundo     

-Destruir todos los “sanos” matrimonios heterosexuales     

-Establecer consejeros en todas las instituciones educativas en cubierto     

-Asumir el control de la red para propagar mensajes de conversión gay     

-Asegurarse de exterminar a todo aquel que no identifique su lado femenino   

-Despojar de plumas a todas las aves… que no hay sitio pa tantas

En fin, cuanta estupidez tiene uno que escuchar…

MOMENTO ESTELAR: Por cierto navegando por YouTube (si, lo reconozco, soy adicto), me encontré con videos grabados del clásico juego de aventura gráfica titulado “Monkey Island”… QUE ILUSIÓN… debo haberme pasado horas, y no exagero, jugando a dicho juego y dirigiendo las aventuras de Guybrush Threepwood luchando contra el malvado pirata LeChuk… que bueno (Usar pollo de goma con tapa de alcantarilla…que grandes citas, y que grandes duelos de espadas con insultos, tengo que hacerme con esos juegos otra vez).

Pasando al fin de semana, pues hubo un poco de fiestuqui, que nunca viene mal, y así la Milana, artista de copla sin igual, acabó recortándome los abuelillos (ricitos que quedan mu mal al final del pelo) en el camerino… situación de lo más surrealista.

Después me anime a ir por un local que no conocía, y al loro al cumplido que me soltaron… me dijeron que parecía un cachorrillo de oso…. ¿¿¿¿EEEEEIIIIINNNN????

Mirad, me han llamado muchas cosas  en mi vida, ¿pero osezno?… eso es algo nuevo… y el caso es que me intente imaginarme a mi mismo en plan osito, y el primero que vino a la cabeza fue el osito Jackie (¿Os acordáis del bosque de Tallac, Jackie & Nuca?)

Saludos


LOS DELFINES Y YO

 (ENTRADA 18)

  

Quince años, esa era la edad que tenía cuando comenzó una aventura de esas que quedan grabadas permanentemente en la memoria de uno. Supongo que debería empezar hablando de mí a esa “idílica” edad. Siempre he sido más bien introvertido, si bien lo escondo tras una mascara de perpetuo buen humor y cordialidad; pero a los quince años era especialmente tímido, y me costaba relacionarme con la gente de mi clase, y me sobraban las inseguridades. Con esto no quiero decir que a día de hoy no me sienta inseguro a menudo, o en otras me retraiga, pero no es comparable con el muchacho cuya historia narro hoy.

DELFINES 25-03-08

Después de mucho cavilar planeé arrojar una carta dentro de la instalación, en ella les relataba mi pasión por los delfines, y les hacia saber que envidiaba el trabajo que tenían, y el equipo que formaban. ¿La tiro? ¿No la tiro? ¿Me como esta uña primero? ¡¡Aaaarrrrrghhhh!! Pues lo hice y me fui a casa aquella tarde sin saber que había dado el primer paso hacía un evento que cambiaría mi vida para siempre.

Soy un hombre de fechas, se me quedan grabadas inevitablemente y se que todo comenzó el dieciocho de Marzo de 1989. Todos los años, mi familia solía hacer una visita anual al zoológico de Madrid, lo cual era uno de mis momentos álgidos, pero en los últimos años la mencionada tradición había sido abandonada. Así que, en la fecha señalada, tras mucho insistir logré convencer a mis padres para que fuéramos allí. Pero esta vez nos íbamos a encontrar con una sorpresa.

 A mis quince años me conocía el zoo muy bien, había estado varias veces con mi familia, y otras tantas con excursiones escolares, y había dos zonas cuyo aspecto desolado siempre me había llamado la atención. Una era una instalación justo al lado de la de los osos pardos, que estaba abandonada, llena de matojos y donde la vegetación había invadido el cemento… tenía un aspecto melancólico que me conmovía por razones que aún no me explico. La otra era inmensa y se encontraba cerca del pabellón de invierno, donde se encontraba el restaurante. En esta enorme sección del Zoo abandonada y desolada, vallada por una verja, nunca se había construido nada, imagino que no le habían encontrado uso alguno.

LOS DELFINES Y YO 25-03-08

Cual fue mi sorpresa al ver que ahora se erguía otra instalación, y un cartel de cemento indicaba que se trataba de un Delfinario. A penas pasamos por el ya que hacía un día bastante malo y llovía. Pero servidor se quedó fascinado y tuvo el extraño presentimiento de que aquel sitio se iba a convertir en algo determinante e importante en mi vida… no me equivocaba.

 Así, mientras todos mis compañeros de clase salían de discoteca, un quinceañero Daniel comenzó a pasar todos sus fines de semana en el zoo. Allí me sentaba en las gradas y observaba los espectáculos de los Delfines. Recuerdo vividamente el primero, era un día soleado y, yo llevaba la cámara antigua de mi padre que me había cedido, los delfines comenzaban pegando enormes saltos que me dejaron sin aliento. Un hombre rubio realizaba el mencionado espectáculo, y después del mismo se tumbo en la playa (nombre dado al escenario de un delfinario), para jugar con los delfines. Yo, ante todo, observaba al equipo que trabajaba allí, pues eran eso, un equipo, y era evidente que se llevaban bien. Mi ambición era clara, deseaba conocerlos, deseaba que aquellas personas se convirtieran en mis amigos, pero no sabía como hacerlo (recordad, quince añitos e introvertido).

Al fin de semana volví con un nuevo proyecto, ya que pasaba mis fines de semana en el Delfinario… ¿por qué no estudiar el comportamiento de dichos animales? Me llevé un par de libros interesantes sobre el tema y me senté en las gradas para ver en que dirección podía llevar un estudio. En ese momento se acercó a donde estaba el entrenador rubio llamado Jim (los nombres los conocía pues los anunciaban durante el espectáculo), y me preguntó mi nombre, yo me puse todo acelerado y nervioso, y por algún motivo que aún no entiendo muy bien (¿pánico social?) le dije Logan, mientras leía un articulo sobre un tal Doctor Logan que había estudiado los delfines. Jim se dio la vuelta y se marchó.

NADANDO CON DELFINES 25-03-08

A la semana siguiente se me volvió a acercar pero en esta ocasión me dijo: “Daniel, ven conmigo”. Yo me callé mientras mi corazón comenzaba a latir a cien mil revoluciones por minuto. Me introdujo en la instalación donde conocí a todo el equipo, Ana, Cosme, Javier y Victoria (Vicky) y muy brevemente a su jefa Alison, fría y distante. Resultó que mi carta les había gustado mucho y les había hecho ilusión. Ana me llevó en un tour de todo el delfinario, jugamos con los Leones Marinos, y luego toque por primera vez a un delfín. La piel era resbaladiza al contacto, como un huevo cocido húmedo. ¡Y aprendí que a los delfines les gusta que les hagan cosquillas en la lengua! Después me dejaron montar en la barca durante el espectáculo y nos tomamos un café mientras nos conocíamos un poco mejor. Por primera vez en mi joven vida me sentí parte de algo, y ese algo además era especial.

Al día siguiente me llevé la decepción de turno, regresé por allí para tomar notas y comenzar mi estudio, y conocí a Joanna, que era responsable de no se que exactamente, y no le agradó mi presencia en la playa mientras tomaba notas, así que me hizo saber que no podía estar allí, cosa que mis quince tacos me calló como una bomba… pero si he tenido siempre una cualidad esta es la paciencia, si sabes esperar todo llega. Así que decidí que tomaría mis notas desde fuera, pero haría patente mi presencia. Vicky se convirtió en una especie de hermana mayor, creo que me caló enseguida y se percató de que, a parte de gustarme los delfines,  sentía necesidad de ser parte de algo, a una edad más que crítica. Y me ayudaba, e invitaba a entrar en la cabina del “speaker” durante el espectáculo, para charlar y conocerme mejor. Se sentaba conmigo en las gradas para hacerme compañía a ratos durante los días de verano mientras dejaba puestas en los altavoces la música de Enya (también utilizada en los números acuáticos). Ella y su novio Javi me diseñaron un diagrama para que calificase la actuación de los delfines en cada espectáculo, aconsejándome que luego comparase la dedicación de los animales con su comportamiento después.

 Y me introdujo a un grupo de chavales a los que tomé particular cariño. Eran Luís, Quique y Natalia, tenían unos cuatro años más que servidor (más o menos). Estaban estudiando el comportamiento de los gorilas, y eran muy majos, me incluyeron en su círculo inmediatamente. Luís soñaba con viajar a África para estudiar gorilas en su hábitat natural, era el más apasionado de los tres. Me enseñaron a tomar focales de comportamiento. Con ellos me iba al final de cada tarde, y pasábamos días inolvidables en el zoo de la casa de campo, intercambiando curiosidades de la fauna. Nos hicimos amigos de infinidad de cuidadores que nos permitían jugar con distintos animales como chimpancés, orangutanes, y el zorro que había en el zoo nos tenía especial cariño. Los cuidadores de la exhibición de serpientes también nos enseñaron curiosidades, y que decir del entrañable lemúr al que llamábamos E.T.

Cosme era el speaker (narraba los espectáculos por el micrófono), y nos moríamos de risa cuando nos ofrecía un “Manolo Show”, que consistía en llamar a Jim (californiano rubio de pura cepa) Manolo durante todo el espectáculo, mientras el contestaba con un acento “evidente”.

Los días de excesivo calor en el delfinario, los pasaba en la galería con ventanas que rodeaba el delfinario tomando notas, hasta que una tarde percibí que los delfines Lizzy, Mary y Guarina me observaban al otro lado del ventanal. Poco a poco aprendieron a reconocerme, y yo descubrí que al hacer chirriar el cristal con las yemas de los dedos, ellas sabían que yo me encontraba al otro lado. Arrojaba una pelotita de papel al cristal, y ellas se contoneaban jugando. Salía corriendo por la galería, y ellas me seguían por los ventanales, y hasta participaban conmigo jugando al escondite cuando me ocultaba entre ventanal y ventanal. Las alejaba de este modo de los curiosos visitantes, que se aglomeraban en los ventanales golpeando los cristales como auténticos animales. Todos los fines de semana se acercaban a mi, y sabían cuando estaba triste, o alegre… no todo el mundo puede decir que delfines fueron sus amigos.

VICKY & LUIS 25-03-08

 Un año después mi paciencia tuvo sus frutos, y se me concedió acceso al Delfinario, y un pase para acceder al zoo gratis. Me había ganado el cariño del equipo al completo, incluso Alison se había vuelto más sociable y pasaba más tiempo con sus compañeros. Quiero pensar que el joven quinceañero había de algún modo actuado como pegamento entre aquella gente que me doblaba la edad. Incluso les acompañaba a tomar algo después de un duro día de trabajo. Yo entonces había sacado muchas fotos en la galería, que aquí mismo cuelgo. Y amplié una de Guarina para regalarle una copia a cada miembro del Delfinario.

 Después del primer año el equipo cambió, hubo gente que se marchó para seguir el rumbo que les marcaba la vida y otros volvían en su lugar. Partieron Ana y Cosme, y llegaron Cecilia y Eduardo en su lugar. Alison se fue y llegó un nuevo jefe, de nombre Marcus, que me continuó permitiendo el acceso, poco nos podíamos imaginar que aquel evento marcaba el comienzo del final de una era. Por otro lado Natalia pasó un año en Estados Unidos, y Quique fue dejando de ir por el zoo. Luís se hizo un buen amigo mío, y cuando nació un gorila en el zoo, pase la noche de guardia con el. Fue toda una experiencia, pasar la noche en un zoo sin visitantes, oyendo los sonidos de distintos animales como ecos que flotaban en el aire.

NATALIA & QUIQUE 25-03-08
Pero el mayor regalo de todos me llegó dos años después de que mi aventura comenzase, y el mismo dieciocho de Marzo de 1991, (siempre he creído que hay una magia detrás de ciertas fechas), se me permitió darme un baño con los delfines. Me enfundé un traje de neopreno y me lancé a la calida piscina de agua salada. Los delfines inmediatamente se me acercaron, sabían bien quien era, sobre todos después de compartir tantas tardes juntos jugando. Había una comunicación sin palabras que no soy capaz de describir, durante una hora nadamos y me deje arrastrar, agarrado a la aleta de Guarina esta me sumergía en el agua para que buceásemos juntos, y sabía perfectamente en que momento había de subirme a la superficie para que tomase aíre una vez más. Hubo un momento en el que saltaron en el agua, y pensando que corría peligro, la petarda de Cecilia me pidió que saliera. Pero pasé una hora en la que el tiempo y la mente se evadieron en juegos y pura magia. Si, ¡esa es la palabra! ¡Magia! ¡La magia existe, y yo la experimente durante una hora del dieciocho de marzo de 1991, hace ya diecisiete años!

AMIGOS 25-03-08 (1)

Una de las cosas que me frustraba en el ambiente zoológico en el que me movía era que muchos de mis amigos hablaban inglés, y yo ni pajolera palabra del mencionado idioma. Se despertó así mi interés por aprender un idioma por primera vez. Así que le plantee a mi padre el estudiar en el extranjero para aprenderlo de una vez por todas. ¡Así es! ¡Mi experiencia en el Delfinario fue la que me llevó a decidirme por irme al extranjero!

Lo comuniqué en el Delfinario y Jim se alegró mucho diciéndome que sería una experiencia que no olvidaría jamás… ¡Tenía razón! Mis amigos del Delfinario me hicieron una fiesta sorpresa después del último día de trabajo, y me tiraron (como era costumbre) vestido a la piscina, para luego saltar ellos también. Así nadamos juntos por última vez con los delfines en una noche de verano estrellada, Vicky me abrazó y me dijo que yo era una persona especial, y que siempre me recordaría, como si supiera que ya nada sería igual… y me fui a casa, para partir a Estados Unidos… pero eso ya es otra historia.

Cuando visité el Delfinario seis meses después en vacaciones, había estallado la rivalidad y el odio entre sus habitantes (de lo cual no quiero hablar en este blog), quise pensar que las cosas se arreglarían pero no lo hicieron. Luís no estaba ya, espero que sus sueños africanos en compañía de gorilas se hayan cumplido. No regresé hasta 1998, fecha en la que ingresé a trabajar durante un año, y ya no quedaba nada más que uno del equipo que yo había conocido, pero estaba consumido por la amargura y más allá de la redención. No he vuelto por el Zoo de Madrid desde entonces, en Noviembre hará diez años.

En mi memoria permanecen solo los recuerdos gratos: las tardes al ritmo de Enya sentado en las gradas con un calido sol acariciando mi piel, los juegos con los delfines en la galería refrescante, y los atardeceres abandonando el zoo en compañía de mis amigos entre risas y anécdotas del día vivido. Fueron dos años de adolescencia que me atrevo a calificar de envidiables. Como consecuencia cada vez que nado, como un delfín, logro evadirme, logro desconectar, el tiempo se detiene para retornar a los puntos deseados del mismo. Allá donde estén, espero que todos sus sueños se hayan hecho realidad… yo ahora solo puedo intentar narraros mi felicidad absoluta mientras Guarina me observa desde la foto, que tomé,  colgada en la pared… ¿tendrán mis amigos aún las suyas?

Extracto de una carta de Vicky (1993):

“.. No te desvalores ni tengas miedo al tomar una decisión, aunque te confundas… aprenderás algo nuevo. Yo también a veces echo de menos los buenos momentos que pasamos juntos, pero como te decía… todo cambia.”

  Estés donde estés Vicky, siempre has estado en mi corazón, te quiero, eres parte de lo que he construido a día de hoy, de esas piezas escasas que son sólidas… espero de corazón que seas feliz.

Besazos y Abrazazos


EL CUMPLEAÑOS DE ANA, WONDER WOMAN

  

 (ENTRADA 17)

 

Una vez más llegó la Semana Santa, y este año particularmente pronto, coincidiendo entre otras cosas con la festividad irlandesa de San Patricio, en la que es tradición beber como cosacos. Sin embargo lo más destacable ha sido la quedada para celebrar el cumpleaños de nuestra buena amiga Ana, afectuosamente conocida como la Wonder Woman, en su casa.

LA WONDER WOMAN 17-03-08

Comenzando por el principio, la semana se presentó tranquila, mi pobre ordenador regresó del hospital tras padecer una peligrosa sobredosis de Memoria RAM. Pero… ¡hay iluso de mi! Este no era el único problema, dicha sobredosis había jodido un puerto USB, y fundido la tarjeta de red… con lo cual hubo que llamar al técnico de nuevo, que no voy a negarlo, cuando agarró el destornillador y se metió debajo de mi mesa para operar a mi pobre niño (el ordenador, se entiende), empecé a notar como unos sudores, unos sofocos por todo el cuerpo… ¿sabéis todas esas fantasías que ocurren en la películas más “guarripes”? Pues bien, ninguna de ellas ocurre en la vida real…  ¡ROWTLF! Y digo yo ¿por qué no pudo venir un técnico feo lleno de pecas, con gafas y pinta de empollón? Pues no, me tuvo que venir un tío con una carilla de no romper un planto, pero guapo, guapo, guapo a rabiar… que solo quedo fascinado por mi ordenador y “Dardo”,la espada de Frodo, que tengo colgada en la pared, regalo de mi super amiga Elena y su churri David… Me tuve que conformar con tener el ordenador funcionando una vez más, que no es poco.

El resto de la semana transcurrió de manera tranquila, y me llegó mi ración mensual de tebeos, cosa que siempre es un subidon. La comunidad mutante lo sigue pasando mal, y habemus cancelaciones y novedades. Se marcha el “Cable & Deadpool”, el “New X-Men”, tenemos dos estrenos “X-Force” y “Cable” (esta vez sin su mercenario bocas). Todavía no me ha llegado la otra novedad “Young X-Men” (que vendrán a sustituir a los “New”). Y la solo quedan cuatro números para que el “Uncanny X-Men” llegue a su número 500, evento que espero se curren como es debido.

Y así poco a poco llegamos al fin de semana, y poco a poco la ciudad de Madrid se quedó vacía, lo cual personalmente encuentro relajante. No soy fan de salir de vacaciones en estas fiestas, aunque alguna rara vez lo haya hecho, me gusta quedarme en esta la capital del stress, ya que por una vez el mismo desaparece. Así después de un viernes sin demasiados eventos el sábado comenzamos celebrando el cumpleaños de mi buena amiga Ana, conocida por muchos como “la marijuaqui”, aunque para mi ha sido siempre Wonder Woman.

 Así llegamos al, como dice ella, “Pueblo de los Malditos”, cerca de Toledo, y como es costumbre la excelente anfitriona nos recibió botando de alegría cual “Oso Gummy” pero sin necesidad del famoso jugo de Gommibaya. Así disfrutamos de una excelente barbacoa bajo la atenta supervisión de su fantástico marido Fernando. La tarde transcurrió con anécdotas e historias, de las cuales la más divertida fue probablemente la de Aldo, y como trabajando de enfermero le dejaron encerrado en la Morgue… y es que si alguien tiene la capacidad de narrar una experiencia, que tuvo ser de lo más macabra, con un toque de humor, ese no es otro que Aldo… Después de comilona, “cafeses” y tarta, nada menor que un poco de danza del vientre, ¿o era de cadera?, siempre al ritmo de Anilla, Paquilla y Susanilla…

De vuelta a los Madriles, nos tomamos un algo en Picardías donde Aldo me enseño otra valiosa lección, hay que visitar a las vecinas de los locales adyacentes, y así ejercimos de vecinos muy educados, pero claro hay un problema claro, las vecinas, cuando las visitas se presentan sin avisar, se sienten en la obligación de invitarte a chupitos, y uno por aquí, otro por allá, pues acaba uno… ¿Cuál sería la palabra?… ¡PERJUDICADO! De veras hay que tener super-poderes para ser capaz de seguir el ritmo de Aldo. En fin a pesar de esto, la noche transcurrió de manera divertida

De vuelta en el búho, estaba tan cansado que casí me duermo, de hecho se me cerraban los ojillos.

Al día siguiente tocaba paella en casa de la Tremenda, que a pesar de ser una perfecta anfitriona, hemos de decir se pasó en la cantidad de comida: Ensaladilla, dos tortillas y paella (¡Todo riquísimo!) Llegué a la hora señalada pero nadie contestaba por el interfono, y claro uno empieza a sospechar que no se ha enterado muy bien de los planes (con tanto chupito por aquí, y cervecilla por allá). Pues como nadie contesta, agarro el móvil, y resulta que las maris están tomado algo en la Glorieta de Bilbao. El caso es que yo había pasado por allí y ni se habían coscado a pesar de lo guapo, sexy e interesante que soy (¡Vaya hachazo para el ego!). A excepción de la pobre muchacha tecleando su portátil, el resto de la terraza tomada por las gaycillas… bueno, y dos perrillos… ¡Vaya cuadro!

Llegamos a la casa de la Tremenda (todos menos Aldo, catatonico, probablemente, y en fase de recuperación), que la verdad sea dicha me dejo muy impresionado, favorablemente claro esta (¡Ala! Para que luego digas Tremenda) …Estando como estamos en fallas yo me esperaba que nos recibiera vestida de fallera, pero no fue así; aunque todo estaba riquísimo, nada estaba envenado, nos quedáramos mirando fijamente a Gabriel, que fue el primero en probar bocado, para ver si adquiría un tono morado sospechoso. Y como no, después de comer, como buenas maris, con el café se procedió al cotilleo. Se sacó la lista, y poco a poco, este por aquí, el otro por allá… no quedó ni uno vivo… ¡Semos asin! Bueno yo no, que siempre me toca el papel del chico bueno, angelito, comedido del grupo… que tiene que haber de todo.

¿Y que se puede hacer después de comer? Apagar las luces, bajar las persianas y prepararse para ¡chan, chan! Una tarde de terror.

A COMER 17-03-08

Así pues nos tragamos una peli de vampiros, nada como algo gore después de comer, que siempre ayudan a digerir las cosas… entre el que pasaba miedo, el que se empeñaba en analizar cada incongruencia, el devorador de palomitas carbonizadas (C’est moi), y el perro trotando por la sala con ataque de ansiedad masiva, milagro fue que acabáramos de ver la película… con lo que concluyó una tarde muy agradable de domingo… ¡que todo hay que decirlo! Hubo quien continuaba la noche, pero servidor decidió regresar al hogar y salir a correr un buen rato, que había que quemar todo lo consumido durante el fin de semana.

Hoy es San Patricio, y la verdad es que pensaba pasar por el Irlandés al lado de casa, pero la prudencia es buena consejera así que me he quedado en casilla, he actualizado el blog, que todavía queda mucha semana por delante. Pero aquí mi hermano gemelo os desea ¡Feliz San Patricio! (joe, ¡dejarme soñar!… jajajaja)

SAN PATRICIO 17-03-08

Saludos a todos


LA IMPOSIBLE PATRULLA X

 (ENTRADA 16)

 

 

 Quién me conoce bien, sabe que soy un devorador de comics, y que dentro de las muchas colecciones que sigo (Vengadores, Cuatro Fantásticos, Nuevos Titanes, Liga de la Justicia, Thunderbolts, Nuevos Guerreros, Asterix, Percevan, Blueberry, Tintín, Calvin & Hobbes, Watchmen, Star Wars, etc, etc, etc) con enorme pasión, las principales son “Superman” y “Uncanny X-Men”. Pues bien, hoy voy hablar de mi afición a los mutantes.

X-MEN 13-03-08

Mi afición comenzó a través de la ya extinta Comics Forum, hace muchos, muchos años. El primer comic que compre fue el “Patrulla X # 17” (Equivalente al número 160 USA) en 1986, tenía yo trece años, vamos en pleno comienzo de mi adolescencia.

En ella conocí a un grupo de mutantes, entonces compuestos por Tormenta, Rondador Nocturno, Lobezno, Coloso y Espíritu. Se enfrentaban al demonio Belasco para rescatar a la hermana de Coloso, Illyana de su dimensión conocida como el Limbo. La historia me fascino, así que me adentre en el mundo del rastro para conseguir los números anteriores de ediciones Surco y Vértice.

PATRULLA X 17 13-03-08

La idea me fascinaba, los mutantes eran odiados y perseguidos por ser diferentes, pero a pesar de todo defendían a la humanidad que en más de una ocasión representaban una seria amenaza para ellos. Me parece evidente que cualquier adolescente se pueda sentir identificado con ese mensaje de alienación, y si encima esta descubriendo su homosexualidad, como era mi caso, pues más todavía.

Ahí es donde esta claro que radica el éxito de los X-Men. Hasta aquel entonces yo devoraba a Superman y sus películas con el inigualable Christopher Reeve. Pero se trataba de un caso distinto, a Superman lo adoraba todo el mundo era el héroe mundial por excelencia, cuando salvaba al mundo recibía la gratitud de todos.

Para los X-Men era distinto, arriesgaban la vida constantemente para salvar a un mundo que les temía y odiaba por ser diferentes. A los trece años, yo era chaval más bien introvertido, reservado, con infinitas inseguridades, y me costaba relacionarme con mis compañeros de clase, con los cuales nunca lograba sentirme identificado. Supongo que no es exagerado decir que los personajes de los X-Men se convirtieron en más que simples personajes de ficción, eran amigos. Cada mes devoraba sus aventuras me preocupaba por sus problemas, y si alguno moría lo pasaba francamente mal. Así experimente sus macro sagas tales como la Masacre Mutante, o Inferno (mis dos favoritas)…

Cabe mencionar que esto no fue siempre así, la colección no disfrutó de demasiada popularidad. El equipo original estaba compuesto por el Profesor X, Ciclope, Hombre de Hielo, Ángel, Bestia y la Chica Maravillosa, aparecieron en su primer número en septiembre de 1963.

X-MEN 1 13-03-08

Durante su primera etapa se incorporaban otros como Mímico, el Cambiante, Polaris y Kaos. La colección se canceló en su número 66, del 67 al 93 los números incluían reediciones de los primeros con distintas portadas.

Fue entonces cuando se relanzó serie con número especial que se convertiría en mítico. Len Wein y Dave Cockrum introducían un nuevo equipo de X-Men con una peculiaridad añadida, eran más diversos y provenían de lugares como Japón, Rusia, Irlanda o Alemania. Esta idea era muy osada considerando que dicho número era publicado en 1975. El nuevo equipo compuesto por Rondador Nocturno, Lobezno, Banshee, Tormenta, Fuego Solar, Coloso y Ave de Trueno, era reclutado para rescatar al antiguo y sustituirlo. Llegaron entonces Chris Claremont y John Byrne (escritor y dibujante), y la fiebre mutante se disparó hasta límites insospechados.

GIANT-SIZE X-MEN 1 13-03-08

 

El mundo mutante se expandió y así llegaron los Nuevos Mutantes, Factor X, Excalibur, Cable, Lobezno, y un sinfín de colecciones que expandieron el universo de estos personajes y disparó su popularidad de una manera contundente. El año de los mutantes fue sin duda 1991, con una nueva colección denominada X-Men cuyas ventas fueron astronómicas, y el nuevo equipo conocido como Fuerza X.

Personalmente siempre he sido un fan de Picara, la mutante cuyo poder le imposibilita el contacto físico con nadie, una metáfora impresionante sobre lo que la soledad puede simbolizar para alguien. Me encanta su relación con Gambito, chulazo dispuesto a seguir con ella a pesar de que no pueda haber contacto físico entre ellosAunque otros muchos como Rondador, Estrella del Norte o Jean Grey son objeto también de mi devoción. Como línea argumental me encantó la del Virus del Legado, que afectaba a los mutantes hasta matarlos, y que poco a poco se fue extendiendo a la población  humana (una alegoría a la crisis del VIH), hasta que se encontró una cura. A día de hoy aún pienso que dicha historia podría haber dado mucho más jugo. Pero lo esencial es que los X-Men siempre han tratado temas de revelancia como la discriminación, los problemas sociales, los personales de auto aceptación, el de la esperanza de reformarse y mejorar como persona, y sobre todo el de permanecer siempre fiel a lo que uno entienda como un modo correcto de vivir, sin importar las dificultades que se presenten.

A los dieciocho años, me mude a Estados Unidos donde viví durante seis años, y fue allí donde comencé a recopilar la colección original, ya que los números forum que tenía los había acabado vendiendo o no habían sido devueltos después de prestados (a Dios pongo por testigo que no volveré a prestar un comic en mi vida). Pero solo recopilar del número 137 (alguno que otro suelto anterior) de Uncanny X-Men hasta el actual, el resto de colecciones mutantes fueron mucho más sencillas de conseguir. Fue mítico llegar a Barajas con una maleta rebosante de comics y la cara de flipao que puso el guardia civil de turno al verlos.

Hace tres años logre completar absolutamente todas las colecciones mutantes originales (ediciones USA), lo cual supuso un momento muy especial para este peculiar frikky. Varias series de dibujos animados fueron creadas (¡¡¡Por dios, que las lancen en DVD de una vez!!!), pero fue en el año 2000, cuando el éxito de los mutantes fue todavía más patente con su debut cinematográfico, que contaba además con un potente reparto, y  un excelente director como Brian Singer. Así a día de hoy tenemos proyectos sobre películas de Lobezno y Magneto en marcha.

PELICULAS 13-03-08

En definitiva, leer a los X-Men ha influido enormemente en convertirme en la persona que soy hoy en día.

Saludos


RECUERDO… CHARLESTON… SIEMPRE

 

 (ENTRADA 15)

 

 

Recuerdo esa primera sensación de calor aplastante, la sensación de atravesar una húmeda cortina invisible, cuando puse mis pies en su suelo por primera vez, un significativo cinco de Junio de mil novecientos noventa y tres. Supongo que después de dos años en un internado masculino, cualquier lugar asemejaría el propio paraíso, pero en este caso era tal la magia del lugar que uno no podía sentirse sino embrujado, enmudecido.

COLLEGE OF CHARLESTON 04-03-08

  Recuerdo el canto del viento, indefinible pero con un ritmo único, mezcla de serenidad y quietud, mientras la mente se dejaba mecer para viajar en el tiempo y observar una ciudad que no representaba otra cosa que elegancia y armonía. Y así aproximándonos a lugar que sería mi hogar durante los siguientes cuatro años de mi vida me enamore de Charleston, aunque quizás entonces aún no lo sabía

Mis ojos desorbitados contemplaban los frágilmente resistentes edificios coloniales, erguidos con orgullo, último monumento a la única ciudad sureña que había sobrevivido a la quema resultante del odio divisorio que una nación sufrió años ha. Las hermosas avenidas enmarcadas con las lágrimas de sus sabios y venerables sauces, cuyas raíces levantaban el pavimento de una manera señorial. Las avenidas que creaban sus ramas y hojas colgantes parecían invitar al corazón a sumergirse en un idílico entorno.

Recuerdo la primera vez que contemplé el edificio principal de la que sería mi universidad, Randolph Hall, sus colores gastados no lograban dañar ni su belleza ni su porte, a pesar del desgaste de los ocasionales huracanes y tempestades. En su extenso jardín frontal, sentado al pie de su sauce llorón, pasaría innumerables horas leyendo con el único sonido de la brisa o de alguna revoltosa ardilla correteando por su corteza.

Recuerdo mi apartamento, un sueño hecho realidad, techos altos, su terraza llena de flores y olor a hierbabuena, el sonido del cantar de los pájaros mientras disfrutaba de una limonada y un buen libro de poesía. Reuniones de buenos amigos amenizadas con guitarras, risas y confidencias en las esquinas. La paz de sentirme por primera vez en paz conmigo mismo, de aceptar lo que soy, de derruir puertas para salir de armarios, y encontrar sonrisas en lo que entendía sería oscuridad.

CHARLESTON 04-03-08 

Recuerdo aquellas calles llenas de cafés y restaurantes que despedían ritmos de un pausado jazz que elevaba el corazón más pesado con un embrujo difícil de describir. Todo ello mezclado con aromas de guisos típicos, salsas especiales, marisco servido en las calles, un bajo en la lejanía me habla de amor y mis ojos le corresponden de igual manera. El “Mercado” utilizado por los descendientes de esclavos, vendidos allí mismo, era ahora el centro de ventas de sus propios productos artesanales, y mientras lo recorrías te dejabas llevar por las canciones melancólicas que entonaban, siempre con pasión, nunca con ira. La calle “King” con sus adoquines escarlatas, cada uno con su nombre grabados, centro estudiantil, donde el café francés estaba al lado de la asociación baptista, al lado del bar gay, al lado del hotel de lujo. Sitios tan radicalmente opuestos en concepto y razón, y sin embargo conviviendo.

Recuerdo “La Casa del Árbol”, con sus normas de convivencia, que nadie osaba perturbar, los carruajes portando turistas bajo la atención de sus orgullosos guías, la cordialidad del desconocido que te deseba buenos días con una reverencia proveniente de otra época. No hay nada que pueda decir de la elegancia y educación sureña que pueda hacerles justicia.

Aquellos pantanos cubiertos de un musgo cuyo verde parecía sacado de un cuento de hadas, y aquellos árboles que emergían asemejando columnas a través de las cuales podías pasear en barca, mientras el silencio era únicamente quebrado por el ocasional canturreo de un grillo o anfibio. Las cabañas que eran testamento de un romanticismo particular. Sus caimanes asomando los ojos con parsimonia engañosa.

Recuerdo sus plantaciones, ahora convertidas en museos, y centros de actividades culturales, rodeadas por campos, ya salvajes, de arroz, y tabaco. El festival anual de la ostra en Boone Hall, con sus guitarras de fondo. Risas, atardeceres, siempre tendidos en la hierba con una brizna entre los dientes, mientras en la lejanía se oía un violín en estrepitosa batalla contra una armónica, y es curioso pero no resulta desagradable al oído. 

RAINBOW ROW 04-03-08

El paseo “Battery”, donde una vez los cañones habían puntualizado el comienzo de una guerra, ahora transcurre un paseo donde el único cañonazo es de la ocasional ola que golpea sus muros. Los viajes en barca hasta el Fuerte Sumter, saboreando el dulce mar en mis labios, con aquel intenso olor a salitre, mientras el viento golpeaba delicadamente el rostro de quien en ese momento se sentía eternamente joven. Y así, uno descubre el placer de perderse en el tiempo.

 Recuerdo la lluvia evaporándose antes de tocar el suelo, las cervezas en «Vickery’s» con afables desconocidos. El mirador de la bahía, al lado del verdoso “Waterfront Park”, en sus mecedoras de madera que crujían con levedad, ¿cuántos amaneceres habré contemplado, cuantas sonrisas, cuantas lágrimas?, todos atesorados momentos, todos elevados al inmensurable estado emocional de un entorno cautivador.

Recuerdo tus ojos azules, con aquel mechón moreno atrevidamente cayendo entre medio, a través del agua de la fuente del parque, y aquella sonrisa que hipnotizaba los sentidos de la persona más temperamental. “Tímidas introducciones dan lugar a tiernas eternidades” me solías decir. Susurros… “todo esta bien”… “te quiero”… caricias llenas de dulzura en una calida noche que transcurría con la lentitud requerida… solo recordándolo siento tus brazos a mi alrededor y una seguridad ya difuminada por el paso del tiempo… momentos especiales que culminan en combinaciones de rojos, naranjas y escarlatas. El “Dinner” de madrugada, con su maíz dorado, y tortitas dulces, sobran las palabras, los ojos comunican lo esencial.

LAGO COLONIAL 04-03-08
Paseos por las románticas playas de aguas cristalinas repletas de medusas de mil colores. Aquellas tormentas de verano, amenazantes, el agua corriendo brava por las desbordadas calles, la serenidad ante la llegada del huracán, con un sentimiento de cooperación arrollador. “Mama Holiday” tocando el timbre de mi puerta cada primer día del mes con una tarta para celebrar la llegada del mismo, siete templos de creencias distintas conviviendo en frente de casa, e invitándote a que experimentases sus rituales sin compromisos.

El bullicio de la ciudad cada mes de Mayo con la llegada del Festival Spoletto, opera, teatro, conciertos, bailes, artistas de todo tipo de variedades, calles inundadas de colores, júbilo, música, fiestas repletas de alegrías. “No sueltes mi mano”…. “Nunca, nunca…”

Charleston de mi alma, ¿tenías acaso algún defecto? Es de suponer que así fuere, más no logro recordar ninguno, mi mente se evade siempre a aquellos anocheceres de películas, mirando la puesta de sol, dejándose llevar por la música producida por el silbido del viento entre los juncos. Que fácil resultaba amar en tu entorno, que intenso resultaba ser amado en semejante marco, que recuerdos de juventud me poseen que ya jamás regresaran, más en mis sueños te sobrevuelo, y en mis ojos capturados se haya cada uno de esos instantes como auténticos tesoros.

PLANTACION MAGNOLIA 04-03-08

Diez de Julio de mil novecientos noventa y siente, cada paso que doy me desagarra el alma, soy licenciado, y de repente me pregunto porque tenía tanta prisa. ¿Cómo es posible que cuatro años se conviertan en un suspiro? Así cada paso me hace sangrar cojo el taxi que me aleja del paraíso, y abandono el sitio que con más cariño he podido denominar como mi hogar. Mi avión despega y siento un desgarro profundo, muy dentro de mí, como si me hubieran partido en dos. Supongo que a día de hoy puedo decir que un pedazo de mi ser quedo atrás, en Charleston, y quizás por ello nunca me sentiré completo. Tampoco deseo sentirme así, me consuela que hay una parte de mí que quedo allí.

Ojalá mis palabras pudieran hacer justicia a mi ciudad especial, ojala supiera expresar con elegancia y estilo lo que me hace sentir cada vez que la recuerdo. Más soy una persona simple, y se me ha olvidado como sentir, como amar… aunque afortunado porque te bebí en todo tu esplendor, cuando se vivía para el placer, aún ahora con recuerdos que el viento no se llevó me conmuevo, y siento verdadera nostalgia.

Te echo de menos, ciudad de mi corazón…